En primer lugar mi tarea fue en Chile. Visité dos congregaciones: La Serena, donde hay un grupo nuevo y Copiapó, en el desierto de Atacama. Ambas comunidades deseaban poner fundamento respecto a la familia, tema que también abordé en el consejo de pastores de Copiapó. De la familia casi nunca se habla y cada vez que se toca es un impacto por todos lados.
Dios también nos permitió a Ángel Negro, Jorge Himitian y a mí visitar a Orville Swindoll, hermano que estuvo mucho tiempo con nosotros. Quisimos verlo y pasamos tres días con él.
Luego estuve con Eduardo Carvahlo y su familia, ellos están bajo nuestra cobertura. Con Eduardo viajé a otro país centroamericano donde vimos el obrar de Dios por las casas y con deseos de comprender el reino de Dios. Eduardo es muy eficaz en la tarea en esa nación. De allí fuimos a Orlando donde funciona un grupo de unos 15 hermanos que están creciendo en las cosas del Señor. Esto fue parte de mi viaje.
Víctor Manuel Rodríguez