Pablo y Gisella Holsman, pastores de la comunidad cristiana en Paysandú (Uruguay), iniciaron la obra en la pintoresca ciudad de Esperanza, situada en el corazón de la Provincia de Santa Fe, a unos 200 kilómetros de Rosario. Pablo, oriundo del lugar, durante muchos años sembró la semilla del evangelio entre sus familiares y conocidos. En el 2007 se unieron a la tarea hermanos de Rosario.
En los comienzos de la congregación Emanuel Holsman fue instrumento esencial para su establecimiento, actualmente Emanuel reside en Buenos Aires y está completando la especialidad en Oftalmología, ya en sus últimas instancias.
Unos 14 hermanos caracterizados por la sencillez y el sentir de familia conforman esta comunidad. No obstante, con fe y confiando en el Señor, van por más. En ese andar cotidiano y simple, como verdadera hermandad en Cristo, Dios ha sanado enfermedades, librado de vicios, y fundamentalmente, ha transformado vidas para su Gloria.Uno de los testimonios más impactantes fue la sanidad de Pepe, un hermano mayor que antes de convertirse sufrió dos ACV y, estando casi al borde la muerte, Dios lo salvó y restauró.
Hace unos años, con el generoso aporte de la iglesia de Paysandú, se compró una amplia casa en el macro centro de la ciudad destinada exclusivamente a las distintas actividades del grupo. Luego de adquirir la vivienda, varios discípulos se abocaron a acondicionarla en una jornada de trabajo. Se trata de una comunidad en franco desarrollo, que intenta vivir día a día en victoria, no sin pruebas y adversidades. Oremos por la comunidad en Esperanza.
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